La Torre del Reloj arranca desde un zócalo y tiene planta cuadrada. Consta de dos cuerpos, en el primero de doble altura, se abre un arco de medio punto. Los dos cuerpos están separados por una triple moldura. El segundo cuerpo consta de una pequeña ventana y una cornisa sobre la que se levanta un campanario de estructura de hierro que data según su inscripción de 1884. Sobre la estructra se eleva una veleta.
Levantar una torre con la sola función de indicar las horas era algo inusual en la época y tiene un marcado caráter simbólico. En el siglo XVIII las horas las marcaban las campanas de las iglesias. Construir un reloj público es muestra del enfrentamiento entre el poder civil y eclesiastico que protagoniza el Reinado de Carlos III: la expulsión de los jesuitas en 1767, o la prohibición d a las órdenes religionas de instalarse en las nuevas poblaciones, son muestra del pensamiento de su reinado.
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